Cuando se presenta la oportunidad de una asignación internacional, el profesional se enfrenta a la decisión de aceptar o no la propuesta de su empresa. Marcharse a otro país puede suponer un salto profesional y grandes oportunidades, pero también hay grandes desafíos que hay que tener en cuenta.
La reflexión sobre la oportunidad que propone la compañía exige valorar desde cuestiones personales y laborales a la posibilidad de encarar nuevas experiencias y aprendizajes. Estos son diez aspectos que exigen una consideración de pros y contras antes de tomar una decisión que afectará irremediablemente al profesional desde múltiples planos.
Objetivos personales y profesionales
Antes de embarcarte en una asignación internacional, es crucial plantearse las metas personales y profesionales a corto, medio y largo plazo. Pregúntate si esta oportunidad se alinea con tus aspiraciones. ¿La experiencia en el extranjero te proporcionará habilidades y conocimientos que no podrías adquirir en tu lugar de origen? ¿Contribuirá al crecimiento de tu carrera y te permitirá desarrollarte en otros ámbitos de tu interés? Reflexionar sobre tus objetivos personales y profesionales te ayudará a determinar si aceptar esta asignación internacional es la elección correcta.
Duración de la asignación internacional
Algunas asignaciones son de corto plazo, a modo proyectos temporales, mientras que otras pueden extenderse incluso durante varios años. Evalúa cuánto tiempo estarás en el extranjero y cómo afectará esto a tu vida y tus planes de futuro. Una asignación a corto plazo puede ser una excelente oportunidad para ganar experiencia, pero una asignación a largo plazo puede tener un impacto más profundo en tu vida y tu carrera.
Reubicación familiar
Si tienes una familia, la asignación internacional también afectará directamente a tus seres queridos. Es vital observar con la empresa la posibilidad de que tu pareja e hijos te acompañen. Y lo más importante, asegurarse de que se sienten cómodos con la idea, más allá de los miedos lógicos que pueden darse ante un cambio de vida. Hay que tener en cuenta que esta decisión de marcharse al extranjero puede suponer que tu pareja tenga que dejar su trabajo y tus hijos su centro de estudio y amistades.
Además, también implicaría no ver frecuentemente a otros familiares con un posible grado de dependencia, como los padres. Por lo tanto, es importante plantearse todas estas cuestiones y abordar las preocupaciones y necesidades de la familia antes de comprometerse a la asignación.
Impacto financiero
El aspecto financiero de una asignación internacional es un elemento clave que puede hacer desequilibrar la balanza hacia uno u otro lado. Es importante tener claros todos los detalles sobre tu futuro salario, los beneficios que ofrece tu empresa y cómo funcionarán los impuestos en el nuevo destino.
Además, conviene investigar el costo de vida en el país de la asignación internacional y establecer una comparación con respecto a tu país de origen. Esto te ayudará a determinar si la asignación es recomendable desde un punto de vista financiero y a planificar tu presupuesto.
Entorno cultural y social
Cuando te trasladas a un nuevo país, te enfrentas a entorno cultural y social diferente. Antes de tomar una decisión necesitarás conocer a fondo la cultura, las costumbres y las normas sociales del país en el que te vas a asentar.
De igual manera, y si cuentas con el tiempo suficiente, puedes comenzar a aprender el idioma local o, al menos, las frases y el vocabulario más básico, lo que puede ser muy útil para facilitar la comunicación y, por tanto, la adaptación. Comprender las diferencias culturales te ayudará a evitar malentendidos y a crear conexiones más sólidas con la comunidad local y tus compañeros de trabajo.
Apoyo de la empresa a la asignación internacional
Antes de aceptar una asignación internacional, es fundamental notar que la organización te brinda todo el apoyo que necesitas. Asegúrate de que ofrezcan servicios de reubicación que incluyan ayuda con la búsqueda de vivienda, asesoramiento legal, asistencia en el periodo de adaptación, búsqueda de colegio para tus hijos y orientación sobre cuestiones administrativas.
Contar con la ayuda de una empresa especializada en relocation y mudanzas internacionales como Hasenkamp te permitirá centrarte en tu trabajo y en tu adaptación al nuevo entorno, sabiendo que cuentas con el respaldo necesario para optimizar tu rendimiento en un breve espacio de tiempo.
Requisitos legales y de visado
Cada país tiene sus propios requisitos legales y de visado. Por lo tanto, conviene tener claros los requisitos de inmigración y residencia que tiene el país al que te trasladarás. Esto puede incluir trámites de visado, permisos de trabajo y otros documentos necesarios. Además, también hay que tener en cuenta los plazos, lo que exige una planificación con la suficiente antelación para evitar complicaciones legales y estrés de última hora.
Seguro de salud y beneficios
La atención médica es un aspecto fundamental que considerar. Lo normal es que tu compañía te proporcione un seguro de salud adecuado tanto para ti como para tu familia. Si tienes dudas pregunta cómo funcionan los beneficios, cómo acceder a la atención médica en el país de destino y cuáles son los procedimientos en caso de emergencia. La salud es un tema crucial, y estar bien informado te brindará tranquilidad a la hora de tomar una decisión informada.
Red de apoyo personal
Establecer una red de apoyo personal en el nuevo destino es clave para una experiencia exitosa en el extranjero. Antes de aceptar la asignación internacional puedes tomar contacto con expatriados, grupos de apoyo o colegas que hayan pasado por una experiencia similar.
Estos contactos pueden darte una información muy valiosa y, de paso, proporcionarte apoyo emocional como antesala de una amistad que puede tomar forma durante tu posible estancia en el extranjero. Está comprobado que la creación de una red sólida de contactos hace que la transición sea más suave y fluida.
Plan de repatriación
No solo debes pensar en tu partida, sino también en tu regreso. Asegúrate de tener un plan de reinserción en tu carrera una vez que la asignación internacional llegue a su fin. Esto podría incluir la inclusión en un nuevo puesto laboral. Además, el plan de regreso que te ofrezca tu empresa debería implicar el crecimiento en tu carrera y la puesta en práctica de todas las habilidades aprendidas durante el periodo de asignación internacional.
Aceptar una asignación internacional no es un imple trámite. Es todo un desafío que nos invita a crecer, a evolucionar y a descubrir una nueva versión de nosotros mismos. Más allá de los aspectos financieros y logísticos, implica un viaje de autodescubrimiento y adaptación.
La oportunidad de aceptar un puesto en un nuevo país supone sumergirnos en una cultura diferente y en una nueva forma de trabajar, además de afrontar grandes desafíos laborales. Aprovechar al máximo esta oportunidad requiere una mentalidad abierta, perseverancia y la voluntad de abrazar lo desconocido. Valorar los pros y los contras es clave para aceptar o rechazar el reto propuesto.